En la Argentina, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), recientemente, otorgó aprobación para una medicina llamada nivolumab. Esta inmunoterapia demostró aumentar en forma significativa la sobrevida global (en algunos casos, la duplica) en comparación con la quimioterapia en pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas, el subtipo más frecuente, que representa el 85% de los casos.
Esta medicina se aplica en forma intravenosa y está indicada para los que fueron fumadores y para los que no. En tanto, beneficia a todos los grupos de pacientes porque no está dirigido a la célula tumoral, sino que al sistema inmune. Esto hace que los tratamientos inmuno oncológicos se tornen clave y esperanzadores al no atacar a la célula tumoral, sino que tratan de activar el sistema inmune para que luche de manera eficiente contra el tumor. Asimismo, frenan señales inhibitorias que emite el tumor para que el sistema inmune se quede paralizado.
Hasta ahora, la cirugía, la radioterapia, terapias citotóxicas o dirigidas han representado la base del tratamiento del cáncer en las últimas décadas, pero la sobrevida y calidad de vida a largo plazo siguen siendo retos difíciles de lograr para una proporción importante de pacientes con enfermedad avanzada. Por eso, se espera que la inmunoterapia de respuesta a la lucha contra el cáncer.
Tres de los principales retos que tiene la lucha contra el cáncer
1) Disminuir los factores que inciden en su frecuencia, como el tabaquismo.
2) Mejorar el diagnóstico precoz, principalmente en el cáncer de pulmón que se diagnostica tardíamente.
3) Mejorar los tratamientos disponibles una vez que la enfermedad se manifiesta.